Las primeras sensaciones tras unas horas trasteando con Google+ resultan bastante ambivalentes. Por un lado, se aprecia un buen trabajo en el desarrollo de interfaz: limpio, con sus elementos muy bien integrados, con apariencia sencilla y una barra superior con los cuatro elementos básicos: Home, Photos, Profile y Circles. Por otro, una gran profusión de similaridades de maquetación y situación de elementos con respecto a Facebook. En Home, un aspecto muy parecido: tres columnas, en la de la izquierda un menú, en la central el llamado Stream a modo de muro, y en la derecha, contactos y sugerencias.
Nada más entrar, me encuentro con la integración de Google Profiles, base de la gestión de la identidad: si no tenías bien gestionado tu perfil en esa herramienta, no es mal momento para hacerlo, es tiempo que te ahorrarás cuando quieras probar Google+. A partir de ahí, impresión de beta en primera etapa: solo me encuentro a mis amigos de Google, que son los que llevan cierto tiempo probándolo, alguno de hecho ya me había añadido antes de que yo entrase. La red te presenta sugerencias extraídas de tus contactos de Gmail, y puedes ir gestionándolos (metiéndolos en círculos) antes de que ellos mismos tengan acceso.
Se nota un interés fuerte por evitar errores cometidos anteriormente: la compañía evoca muy negativamente el problema que surgió con Buzz y us sistema de inclusión automática de contactos, e intenta por todos los medios dar al usuario sensación de control sobre lo que comparte y con quién lo hace. Pero dado que esto es una red social y solo nos han dado invitaciones a muy pocas personas (muy pocas y ya todas utilizadas porque tenían un límite temporal que impedía "guardarse" ninguna, no me las pidáis en los comentarios :-) la sensación es de vacío, de ¿y yo qué hago aquí ahora? Imagino que la gestión de invitaciones será algo que tendrán bien pensado: de nuevo basándose en experiencias previas, es tan evidente que la política de invitaciones genera una carestía sobre el servicio que redunda en una mayor atención, como lo será el interés de la compañía por negarlo y justificar dicha política con un "es que la estamos peinando". Pero de nuevo, siendo esto una red social, resulta complicado pensar en probarlo sin que esté lleno de gente.
Lo más interesante para mí: filosofía de control total. Cada vez que haces una actualización, que subes una foto, que geolocalizas algo, etc. te encuentras con la posibilidad de decidir sencilla y claramente con quién y qué lo quieres compartir. Escoger la compartición con todos tus círculos, con solo uno o varios de ellos, o con una sola persona es trivial e inmediato. Geolocalizarte implica la opción de si quieres hacerlo solo a nivel de ciudad, con la localización exacta, sin ella… claramente, un intento muy buscado de separarse de Facebook en este sentido. La app de Google+, por el momento solo disponible para Android, es igualmente sencilla, limpia y funcional, con una filosofía de compartición cuando subes algo que sigue la misma experiencia: control total de qué y con quién compartes.
En la esquina superior derecha, casi al final de la barra negra de Google común con otras aplicaciones (y que evoca lógicamente a la barra azul de Facebook), tiene una burbuja de notificaciones (también estilo Facebook), con un desplegable bastante potente. Puedes prácticamente ver todo lo nuevo sin moverte de ahí. Por otro lado, cada update de cada amigo desencadena una profusión de comunicación: aparece instantáneamente en tu Stream, en tu Gmail, y en tu móvil si también lo tienes conectado tanto en el correo como en la app de Google+, algo que claramente habrá que regular con cuidado si no queremos ser víctimas de un ataque agudo de ansiedad…
Por el momento, muchas interrogantes. Nos esperan unos días de trastear, de contar impresiones, de comunicar bugs – por el momento tiene todo un aspecto la mar de "acabado" – y, en general, de organizar la red al gusto de cada uno. ¿Triunfará? ¿Desplazará a Facebook? Obviamente, muy pronto para saberlo. El consenso de los analistas afirma que en el mundo de las redes sociales generalistas, como en Los Inmortales, "solo puede quedar uno". Google+ es un esfuerzo ambicioso, con buenos elementos y alguna característica diferencial interesante que puede resonar bien al usuario avanzado de Facebook, mayor control en todos los sentidos. Pero por otro lado, sigue enormemente la filosofía y el diseño de Facebook en muchas cosas (como no podía ser de otra manera tras la ventaja de la que ha dispuesto Facebook para convertirse en "el estándar de las redes sociales") y tiene un problema de escala: en Facebook te encuentras a todo el mundo, aquí por el momento no es tan sencillo.
La idea de combinar con la libreta de direcciones de Gmail permitiendo gestionar toda dirección de correo que tengas ahí y enviando correos a los que no están en la red parece interesante (quitando el inconveniente de que considera contactos a todas tus direcciones de e-mail, incluyendo listas de correo y cosas que no son personas, y que no todo el mundo tiene su Profile bien cuidado y mantenido), más considerando que el intento de Facebook por construir un nuevo esquema de correo electrónico basado en su herramienta ha sido un fracaso total, pero… ¿existirá una inclinación a "reconstruir" nuestras redes sociales sobre una nueva herramienta cuando la que había no mostraba todavía demasiados signos de desfallecimiento? ¿Diremos dentro de un par de años "stream" donde ahora decimos "muro", o viviremos otra cancelación por falta de uso a las que Google nos tiene acostumbrados? Imposible saberlo.